En un ambiente de celebración y con la presencia de miles de personas, Rigo Mares, candidato a la presidencia municipal de La Paz, cerró su campaña este martes en el estacionamiento del Polideportivo. Durante su discurso, Mares expresó su confianza en la victoria, afirmando que la campaña ha ganado fuerza y apoyo cada día. "El triunfo ya se siente en las calles y en el ánimo de la gente", aseguró.
Desde temprano, ciudadanos de zonas rurales y diversas colonias de La Paz se reunieron para participar en esta fiesta democrática animada por música de banda. Junto a Mares, los candidatos a diputados Claudia Rojas (distrito 02), Leticia Bustamante (distrito 03), Estuardo González (distrito 04), Javier Salgado (distrito 05), Luis Carlos Verduzco (distrito 06), y Marco Puppo (distrito 15) también fueron vitoreados por la multitud, al igual que los candidatos al Senado, Susana Zatarain y Antonio Manríquez, y Armando Martínez, candidato a diputado federal.
En su mensaje, Mares reiteró su convicción de victoria: No me queda duda, ¡Vamos a ganar! ¡Vamos a ganar! y subrayó que La Paz ya ha decidido por un cambio, rechazando la reelección y las promesas incumplidas del pasado. Hizo un llamado a la sociedad paceña a no dejarse engañar por la guerra sucia de sus oponentes, quienes, según Mares, recurren a estos métodos porque saben que van a perder.
El candidato criticó duramente la gestión actual, señalando la falta de agua en las colonias, calles oscuras y llenas de baches, y servicios públicos ineficientes debido a la falta de herramientas y equipamiento para los trabajadores. Acusó a la candidata a la reelección de repetir promesas no cumplidas y enfatizó la necesidad de un cambio inmediato. "Si salimos a votar, el cambio es nuestro y nadie nos lo va a quitar", declaró Mares, instando a la ciudadanía a votar sin miedo y defender el proyecto de transformación para La Paz.
Finalmente, advirtió sobre posibles intentos de la candidata morenista a la reelección para manipular los resultados y afirmó que el cambio no puede esperar tres años más. "Si no lo hacemos ahora, va a ser más difícil sacar a La Paz del bache en el que la han metido los malos gobiernos, concluyó.
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